En este tiempo en el que nos estamos moviendo es imprescindible abrir El Corazón.
Muchas personas viven en la ilusión que ha creado su mente que viven con el corazón abierto, auto-engañándose para así tratar de engañar a la gente con la que convive a su alrededor.
El Corazón solo se abre cuando uno está dispuesto a dar y recibir de la misma manera.
El que solo dá, esta satisfaciendo una necesidad de aprobación externa.
De esta forma satisface una necesidad básica de aceptación por parte de la sociedad que le rodea y que no fue satisfecha por sus progenitores durante su infancia.
Dar constantemente acaba agotando pues en muchos casos no se ve satisfecha la expectativa de aprobación, admiración y agradecimiento por parte del otro y esto acaba frustrando a la persona que solo dá, haciendo que su ego estalle en diversas formas tales como el enfado, el juicio y la culpa de manera tanto interna como externa.
El que solo recibe acaba convirtiéndose en una víctima del que solo da y se frustra aunque de distinta manera dado que cuanto más recibe, mas exige, llegando a no alcanzar la expectativa de que es capaz de recibir todo cuanto pida, sintiendo entonces la frustración que lleva al fracaso de su existencia.
Aquí el ego actúa desde el victimismo, el sentimiento de soledad y el rechazo por una insatisfacción que existió en la niñez, causando en la edad adulta un Vacío existencial.
Abrir El Corazón a Dar y Recibir de igual modo satisface a La Mente con lo cual El Ego desaparece dando paso a La Humildad y La Gratitud que nacen de la profundidad interna del Ser unido a un sentimiento de amor a través del corazón.
De esta forma Dar y Recibir mantiene el equilibrio interno, tan necesario para La Evolución del Ser.
Con Amor Brisa.
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